• 1 calabaza grande
• 1 pimiento rojo seco
• sal y pimienta recién molida
• un buen puñado de hojas frescas de salvia
• 1 rama de canela, rota en pedazos
• aceite de oliva
ELABORACIÓN
Con los años he visto calabaza asada cocinada de muchas maneras y tengo que decir que esta forma particular, es una de mis favoritas. A pesar de que es muy estilo toscano, el sabor me recuerda a las recetas inglesas de chutney que me he encontrado en libros de cocina antiguos. Cuando se asan de esta manera, la calabaza es maravillosa, se come en parte de una placa de antipasti, o en sopas, o mezclada con la pasta o con carne. Otros tipos de calabazas que son ideales para asar la calabaza con forma de cebolla (que tiene una densa piel de naranja) y calabaza (que tiene una piel de naranja-gris y es un poco más aplastada que redonda). Pregúntele que clase de calabazas tiene su frutero de confianza.
Precaliente el horno a 180 ° . Partir a la mitad la calabaza, retirar y reservar las semillas, a continuación, cortar la calabaza en rodajas o en trozos, sin pelarla Utilizando un mortero o un recipiente de metal con un rodillo de amasar, golpear el chile rojo seco con un buen pellizco de sal.Añadir las hojas de salvia enteras, los trozos de canela y aceite de oliva suficiente para mezclar y frotar todo sobre los pedazos de calabaza para que estén bien cubiertos.Coloque la calabaza en una sola capa en una bandeja de hornear y sazone ligeramente con sal y la pimienta. Espolvorear las semillas y cubra bien con papel de aluminio y hornear por 30 minutos, o hasta que la piel de la calabaza esté suave, luego quitar el papel aluminio y cocine por otros 10 minutos hasta que la calabaza esté dorada y crujiente. Retire la canela y deguste esta maravilla
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